FERNANDO COUSO GARCIA

– Graduado en Criminología por la Universidad del País Vasco. UPV-EHU.

– Técnico Superior en Prevención de Riesgos Laborales.

ZURIÑE GONZALEZ SANCHEZ

– Graduada en Criminología por la Universidad del País Vasco. UPV-EHU.

Síguenos
  >  Abusos policiales   >  Una de policías y delincuentes … (que en este caso son los mismos) II

Una de policías y delincuentes … (que en este caso son los mismos) II

Fernando Couso García

 

El pasado 14/02/21 publicaba el post titulado “Una de policías y delincuentes … (que en este caso son los mismos)” donde mostraba mi indignación por la brutal paliza propinada por dos miembros de la Policía Nacional contra un ciudadano y su hija de 14 años.

Si a mediados de febrero, tras ese suceso, pensaba que mi indignación y rabia no podían ir a más, la vida me ha vuelto a dar otra lección demostrándome que todo, absolutamente todo, puede empeorar. Hoy, 19/03/21, Día del Padre y tan sólo 35 días después, debo seguir escribiendo, aunque ahora con una desagradable y peligrosa sensación de impotencia y desgana, (algo que a nivel profesional no es nada bueno), mezclada con otra sensación, aún mayor, de tristeza y derrota.

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Jaén, y en contra del criterio de la fiscalía, ha ordenado dejar en libertad, sin fianza, a los policías José Luis P. C. y Manuel F. N., que el pasado 12 de febrero protagonizaron una brutal agresión contra el ciudadano Carlos Mendoza y su hija de 14 años. La Audiencia Provincial considera excesiva la prisión provisional, califica los hechos como una «riña» en un bar y critica al Juzgado de Instrucción nº. 3 de Linares por tomar la decisión motivado por la «alarma social» y tras el «asedio a la sede judicial».

¿Riña en un bar?. Pero vamos a ver, ¿”sus señorías” han visto las imágenes?. La salvaje paliza que le propinan entre los dos, el brutal puñetazo a la menor, las palabras y gestos de desprecio y vanaglorio, … Señorías, no sé a qué clase de bares van ustedes, pero en los que voy yo no hay “riñas” de ese tipo. Y la “alarma social” y el “asedio a la sede judicial” son la consecuencia de la indignación y la rabia que, al resto de ciudadanos, han provocado los hechos.

No voy a entrar a discutir con “sus señorías” los artículos 147 y 148 del Código Penal, (quien soy yo para tamaña felonía), pero cómo criminólogo les digo que no puedo estar más de acuerdo con el Juez de Instrucción y con el Ministerio Fiscal. Otros profesionales, (menos ilustrados que “sus señorías”), luchamos día a día por erradicar este tipo de conductas. Los miembros de la Policía Nacional, (y del resto de cuerpos policiales), estén o no de servicio, tienen la obligación de cuidar, defender y proteger a los ciudadanos. En las imágenes se ve a uno de los agresores sentado encima de la víctima, que estaba “boca abajo” y con la cabeza ladeada, propinándole numerosos puñetazos en la cabeza y el rostro. Estos dos sujetos son tan cobardes y sinvergüenzas que se permitieron declarar en sede judicial que “usamos la fuerza imprescindible y no íbamos bebidos”, es decir, no sólo no mostraron su arrepentimiento por su comportamiento, sino que trataron de justificarlo.

La Audiencia Provincial argumenta que «la medida de prisión provisional no puede ser utilizada como pena anticipada”, pero coincido con el Juez Instructor y con el Fiscal cuando afirman que este criterio debe ser aplicado cuando se instruye una causa en la que las pruebas no son concluyentes, pero que, vistas las imágenes, este no es el caso.

Respecto a las quejas de los sindicatos policiales, que habían calificado como desproporcionada la decisión, y a esa asociación de guardias civiles, que han llenado las redes sociales de ejemplos de detenciones de personas a las que se atribuían delitos de lesiones, (incluso más graves que los de Linares, según ellos), que en ningún caso habían sufrido esta privación de libertad preventiva, me reitero en mi argumento. Sois policías, funcionarios públicos, y os exigimos que os comportéis como tales las 24 horas del día. Si no estáis dispuestos a ello, dimitid y buscad otro trabajo.

En fin, todo este cóctel de sentimientos negativos me genera una pregunta, … ¿merece la pena defender una justicia que no es igual para todos?. Ahí lo dejo.

 

P.d.: Como puedes leer en nuestra página web, en el Gabinete Criminológico Iustitia, si consideras que la actuación o intervención de cualquier cuerpo policial, contra tu persona o intereses, se ha realizado vulnerando tus derechos, te informaremos de los mismos y te acompañaremos durante todo el proceso de denuncia y sus posibles consecuencias jurídicas.